He sembrado sobre ti tantas amapolas
que temo haber hecho de tu piel tierra yerma.

mejor una espina que cero


tengo algo encerrado en el pecho. pensé que era una caja, una pastilla atascada o algún moratón pasajero. pero cada día se parece más a un cuerno de rinoceronte, duro, rajado y negro. que no se clava, porque sale de dentro.

creo que es un recuerdo. o dos. de tus dedos y de la caja de tu pecho. tú si tienes una caja. un armario. un misterio. recuerdo sentir, al tocarte, el poroso tacto de los huesos. la albura de un papel vacío que me miraba, altanero.

desde alguna parte recuerdo sentir miedo. no el motivo. sino el miedo.

echo de menos el miedo.

dicen


que la vida es corta y hay que aprovecharla.
si fuese larga, ¿que habríamos de hacer?